martes, 25 de mayo de 2010

Un sueño de Santiago Nasar

La noche anterior al día en que lo iban a matar, Santiago Nasar había soñado que atravesaba un bosque de higuerones donde caía una llovizna tierna, y por un instante fue feliz en el sueño, pero al despertar se sintió por completo salpicado de cagada de pájaros. «Siempre soñaba con árboles» decía Plácida Linero, su madre, quien tenía una reputación muy bien ganada de interprete certera de los sueños ajenos, pero nunca advirtió ningún augurio aciago en los sueños con árboles que él le había contado en las mañanas que precedieron a su muerte...


Extraído de Crónica de una Muerte Anunciada.
Gabriel García Márquez

12 comentarios: