miércoles, 28 de abril de 2010

Inspiración sintética.

La inspiración parecía haber desaparecido sin razón alguna, pues tenía ya varios días sin escribir ni publicar nada nuevo, cosa que acostumbra hacer con cierta regularidad. Tenía buenas ideas pero no alcanzaba a completar ninguna.

Harto de la falta de imaginación intento ayudar un poco a su creatividad preparando un ambiente apropiado. Whisky con hielo, luces apagadas, música de fondo y un cursor que parpadea sobre una pagina en blanco. Primer trago y las ideas empiezan a fluir: un hombre que le da la vuelta al mundo buscando la felicidad y termina encontrándola en el preciso momento en que deja de buscarla; el tipo que cree estar muerto porque nadie le escucha y luego se da cuenta de que realmente es el único ser vivo en toda la tierra; el hombre que mato la tristeza; la niña que se rehúsa a dormirse sin escuchar un cuento y recibir su beso de buenas noches…

Solo ideas absurdas, cosas que nunca pasan. Agotado por el esfuerzo, con un ligero mareo alcohólico y los ojos cansados por la pantalla, se da por vencido. No hay forma de forzar a la musa. No le queda más que escribir su propia historia:

“La inspiración parecía haber desaparecido sin razón alguna, pues tenía ya varios días sin escribir ni publicar…”

martes, 20 de abril de 2010

Despedida

Cuando decidimos iniciar esto apenas teníamos unos 20 años. En ese entonces nos necesitábamos mutuamente. Y míranos ahora, tenemos treinta y pico y nos acercamos a los cuarenta, estamos saturados y cansados después e haber atravesado un periodo tan intenso. Además de eso, ahora los intereses personales se imponen.

Se cierra un ciclo y no sé qué va a pasar en el futuro con nosotros. Dijimos que no nos iba a temblar el pulso cuando no le encontráramos más placer a lo que hacíamos, y que no íbamos a seguir por inercia. Pero nos tiembla. Tuvimos muchas deliberaciones y llegamos a esta conclusión. Decidimos terminar de esta manera. Este es el momento. Ya todo ha terminado. Haciendo un esfuerzo para reprimir el llanto me dispongo a gritar la frase que llevo ensayando por tanto tiempo:

“No solo no hubiéramos sido nada sin ustedes, sino con toda la gente que estuvo a nuestro alrededor desde el comienzo, algunos siguen hasta hoy...Gracias… Totales.”

domingo, 18 de abril de 2010

martes, 13 de abril de 2010

Bocanadas.

Camino bajo la discreta lluvia en medio de una larga noche. Desde mi mano izquierda, con su luminosidad, un cigarrillo anuncia mi llegada a lo lejos y a la vez marca mi primer contacto con el tabaco. Una experiencia interesante, mas por la relajación que produce el observar el humo mientras se aleja que por la invasión de nicotina en mis pulmones.

Por fin he llegado hasta el edificio en el que se encuentra su departamento. Subo las escaleras hasta el segundo piso y me detengo frente a su puerta. Inhalo el humo y dejo salir la última bocanada mientras repaso el plan. Tocaré a su puerta y ella me abrirá, le diré que soy un idiota y le pediré que me perdone, que olvide todo lo que dije y que recoja sus cosas para volver conmigo a casa. Ella sacará la maleta que ya tiene preparada y regresaremos juntos al lugar del que jamás debimos haber salído. Si toco y no abre la puerta, encenderé mi segundo cigarrillo y regresaré cabizbajo al agujero del que salí esta mañana.

El humo ha desaparecido. Toc-toc.
Veamos que sucede…

domingo, 11 de abril de 2010

Amor de verano.

Este había sido, por mucho, el mejor verano de mi vida. Desde el inicio, y contrario a todos los pronósticos, las cosas se habían desenvuelto con una facilidad increíble. No sabría decir a ciencia cierta en que parte del camino me topé con ella, pero aquí estaba, acostada a mi lado. Era la mujer mas bella que jamás se había detenido a hablar conmigo. Al igual que yo, disfrutaba de sus vacaciones en un pequeño lugar lejos de todo, casi perdido en el mapa. Dentro de unos días regresaría a su ajetreada vida en la ciudad. Durante tres semanas convivimos como una pereja llegandonos a entender de una manera un tanto especial, tanto es así que, ante la certeza de saber cual sería su respuesta, le he pedido que regrese conmigo a la ciudad.

Terminó el verano, todo ha sido un juego; Espero que te hayas divertido – Me dijo, mientras se desvanecía ante mis ojos. Yo me quedé atónito, sin palabras y sin entender nada de lo que me estaba sucediendo hasta que pude ver al otro lado de la pantalla como el autor, con una sádica sonrisa en los labios, tecleaba el punto final para esta historia.

martes, 6 de abril de 2010

Sueño

Anoche soñé que me apuntabas y al final se escuchó un disparo.
Quizá por eso no puedo despertar.

domingo, 4 de abril de 2010

Inventario

En el bolsillo izquierdo, la copia de un boleto de autobús con destino a Samana y un celular sin batería. Distribuido entre cabeza y oídos, dos kilos de sal y medio saco de arena de playa. En la maleta, mucha ropa mojada, medio frasco de bronceador, un frasco de gelatina con gel suficiente para un solo peinado, un calcetín sin compañero y una cámara con ciento noventa y dos fotos.
En su cabeza, muchas historias, una caja de viejos recuerdos a los que hubo que quitarles el polvo y dos cajas repletas de recuerdos nuevos.
Aun no sale su autobús y ya está pensando en regresar.